Uno de esos rinconcitos de Santa Catarina que quedan en el alma por años y años es Sambaqui. Un lugar para bañarse sin que filas de sombrillas e hilos dentales atraigan multitudes. En Sambaquí el tiempo se detuvo, hizo una enorme pausa como esperando que uno se pierda en ese momento del pasado que vino de visita al presente. Aquí las tradiciones son tan naturales como el mismísimo aire que se respira y están presentes en la arquitectura, en la gente y en los platos de los bares de la playa. En realidad uno dice Sambaquí, pero hay dos pueblos, Santo Antonio de Lisboa y el mencionado anteriormente. Por comodidad debido a la extensión del nombre se menciona solo Sambaquí, pero muchas veces uno se está refiriendo a ambos.
(fotos: ver autores al pie de la nota)
La arquitectura de Sambaquí es del tipo colonial azoriano, con casas de techos a 2 o 4 aguas, con tejas poruguesas y ventanas de vidrios repartidos y puertas de madera pintadas en vivos colores y enmarcadas por una franja del mismo color o de uno contrastante.
Ir al atardecer a Sambaqui es algo que vas a recordar por años. Lentamente el hermoso paisaje marítimo con las sierras catarinenses de fondo, se va transformando en un cielo estrellado con las luces de Florianópolis intentando emular el brillo del cielo, y el sol ocultandose lentamente pero sin pausa cubriendo el cielo de colores mágicos. Cuando el sol se oculta finalmente el mar y el cielo se confunden en uno, con las luces de la ciudad marcando el horizonte, es ésta la hora que mas disfruto. Quizá sea por que es la hora de cenar!
Se que a muchos les va a sonar a "chivo", pero al igual que los demás lugares que recomiendo en este sitio, no lo hago por una cuestión económica, sino por mi propia experiencia en el lugar. Aclarado ésto "necesito" contarles que una de las cosas que mas extraño durante el año (tal vez la que más) es sentarme en una mesa de las de afuera del bar "Posto da Alfándega" y disfrutar de una suculenta y deliciosa "Sequencia de Camarâo". Por las noches, a veces, suele haber un músico tocando canciones tranquilas del repertorio brasilero (Cobran el show). El paisaje, la paz y la deliciosa comida son un placer demasiado grande como para tener que esperar a las siguientes vacaciones.
No solo hay casas antiguas y restaurantes que cultivan sus propias ostras en la playa para servirlas super frescas, sino que también hay museos, ruinas, una hermosa costanera y mucha historia detenida en el aire esperando que uno la atrape y la conozca.
Fotos: Renata Diem, Cleber Luiz Vieira, Paula Ferrari, Apenas um Olhar,
Daniel Guilhamet, Daiane Evangelista, Mabuela2005.
Bares y Restaurantes:
* Pitangueiras
Rod. Gilson da Costa Xavier 2861
* Restinga Recanto
Rod. Rafael da Rocha Pires 2759 (Punta de Sambaqui)
3235-2093
* Gugu
Antonio Dias Carneiro 147
* Posto da Alfándega (recomendado!)
Rod. Rafael da Costa Pires, 2919
3335-0179
* O Lusitano
Rod. Gilson da Costa Xavier 2099
3232-9093
* Bostrô de Leila
Rod. Gilson da Costa Xavier 2179
3335-0322
* Primeira Estaçâo
Rod. Gilsoln da Costa Xavier 1456
* Bate Ponto Restaurante
Rod, Guilson da Costa Xavier, 51 (Santo Antonio)
3235-2121
* Santo Antonio Spaghetteria Caffe
Rua Cônego Serpa, 301
3235-2356
En dónde queda.